Hola de nuevo, ¿cómo vas de imaginación?… hoy quiero proponerte un ejercicio que se llama «Imagínatelo»…¿empezamos?
Imagínate las siguientes situaciones…
…estás sin trabajo, sin ingresos y con hijxs a tu cargo… los planes que haces para resolver la situación se caen… una parte de tu pasado, que creías cerrado, irrumpe sin aviso re-abriendo viejas heridas… tu ex- te lo pone difícil… tu familia sólo te contacta para pedirte algo… te das cuenta que tu “relación” era una mentira… tu hijx está pasando un mal momento… ¿te lo imaginas?
Bien, ahora cierra los ojos un momento. Piensa en todas esas circunstancias e imagina que todo te está pasando a la vez… ¿cómo te sientes?… es fácil imaginar cómo te sentirías…angustiadx? triste? rabiosx? desanimadx? impotente? desesperadx?…DESBORDADX!!!
Para quién ha vivido una tragedia, en forma de muerte de un ser querido o enfermedad, estos pueden parecer asuntos menores. Mi madre, por ejemplo, acostumbra a decir que «… mientras haya salud, todo se puede resolver!». Y es innegable que la salud es vital. Sin salud nada chuta, cuando falla todo parece secundario y carente de importancia. Es indiscutible que con salud todo se puede resolver.
Pero, ¿cómo lidiar «saludablemente» cuando parece que el universo al completo confabula contra ti con esos “asuntos menores”?
Pues la lidia pasa por hacer lo contrario de lo que apetece. Por supuesto tienes derecho a enfadarte, de hecho te lo recomiendo…sácalo!… llora, grita, patalea, suelta tacos, autocompadécete… desahógate!!!… eso sí, ponte un plazo. Es la manera de evitar quedar atrapadx en ese momento, y si no puedes solx pide ayuda.
Luego…
… toma acción. Levántate y sacúdete el polvo. Puedes no saber el cómo pero la voluntad es el primer paso para iniciar cualquier viaje.
… reconecta contigo. Silénciate y en silencio, como se toman las decisiones importantes, apacigua tu ánimo. La serenidad te ayudará a ver más allá.
… cambia de perspectiva. Sé que resulta difícil la objetividad cuando estás en medio del ojo del huracán pero, como si de un juego se tratará, míralo desde otro ángulo y haz como si le pasase a otrx. Y apunta lo que descubras.
… hazte consciente que eres tú quién decide. No siempre tendrás el control acerca de lo que te sucede pero sí puedes decidir la manera de vivirlo. Es tu elección.
… ponte objetivos a corto plazo. Una pequeña acción diaria en ciertos momentos es todo un logro.
… actitud vital constructiva. Se aprende más del error que del acierto. Acepta tus equivocaciones como una enriquecedora fuente de aprendizaje e intenta, es el primer paso para lograrlo, hacerlo diferente la próxima vez.
… acepta tu responsabilidad. Reconocer tu participación y sus consecuencias, ayuda a delimitar que te corresponde a ti y que no. Asume tu parte, solamente.
… perdónate y perdona. El perdón es la fuerza que corta el hilo invisible que nos une a vivencias y personas indeseadas. Es difícil llegar a él pero es el sentimiento más liberador. Y sin carga emocional, el camino es más liviano.
… quiérete mucho. Cometer errores ayuda a crecer, perdonar libera. Amar hace posible que ambas acciones se den. Y cuando el Amor nace en ti es mucho más fácil compartirlo. Quererte bien es querer mejor.
… y en cuanto te sea posible, échale humor.